El día de ayer mientras me alistaba para salir al trabajo, el cielo mostraba algunas nubes digamos.. normal, lo cual hacia una mañana fría que requería salir de casa abrigado.
El frío se siente un poco intenso e imagino que se debe a la proximidad del invierno. La mañana transcurrían sin cambios hasta que alrededor de las 12, de entre las espesas nubes, el sol daba señales, unos minutos más tarde el sol por fin mostraba su esplendor aunque dentro de la oficina el ambiente era frío. A las 2 de la tarde que es la hora de comer, salimos de la oficina aún con el abrigo puesto, el sol era intenso pero el aire era frío.
Caminamos aproximadamente 8 cuadras para llegar al sitio de comida, tras una hora de tiempo para ingerir los alimentos, nos encaminamos hacia la oficina faltando tan sólo unos minutos para las 3 de la tarde. El sol era aún más intenso, ¡quemaba! pero no ameritaba el quitarse el abrigo pues el viento aún era frío.
Al término de esta, inicié el trabajo para la preparación de alguna propuesta así como un prototipo, daba vueltas en nuestra pequeña bodega en busca de alguna referencia respecto a lo que el cliente requiere. Centrado en eso y al tener la ventana abierta percibí una leve llovizna intermitente que duró unos minutos.
De un momento a otro el viento comenzó a soplar con fuerza lo cual me obligó a cerrar la ventana por la violencia con que azotaba. De pronto la llovizna se hizo un poco más intensa hasta convertirse en una lluvia como tal, todo parecía una lluvia regular cuya intensidad la hacía ver una leve lluvia cuando de pronto, enormes gotas golpeaban la ventana. La llovizna se había transformado en una torrencial lluvia que cada vez era más fuerte.
De un momento a otro el viento comenzó a soplar con fuerza lo cual me obligó a cerrar la ventana por la violencia con que azotaba. De pronto la llovizna se hizo un poco más intensa hasta convertirse en una lluvia como tal, todo parecía una lluvia regular cuya intensidad la hacía ver una leve lluvia cuando de pronto, enormes gotas golpeaban la ventana. La llovizna se había transformado en una torrencial lluvia que cada vez era más fuerte.
La precipitación continuó en un lapso de 10 minutos y entonces comenzó a caer granizo el cual era muy delgado que al contacto con el suelo desaparecía; pensé que era todo cuando de pronto el zumbido se hizo mucho más intenso.
Las piezas de granizo golpeaban el cristal.
Comenzaron a sonar las alarmas de los automóviles estacionados en la calle por el impacto de los granos de hielo.
No sé si haya sido normal ese suceso, pero ese corto tiempo de lluvia y granizada me hizo pensar en el problema actual: El cambio climático. La fuerza e intensidad con que se precipitaba el granizo dejó una alfombra de hojas que arrancó de los arboles de la zona.
Me vino a la mente también la inusual nevada en el santuario de la Mariposa Monarca en Marzo de este año 2016, un lugar en el que se resguardan para hibernar pero fueron sorprendidas por este extraño fenómeno.
No cabe duda que el Cambio Climático es una realidad.
Es por eso que les comparto la liga en la cual podrán ver un documental protagonizado por Leonardo D´Caprio en el que habla precisamente sobre este problema global.
Por favor véanlo y hagamos conciencia sobre lo que le estamos haciendo a nuestro planeta.
Reflexionemos un poco de cómo afectan nuestras acciones a nuestro ecosistema.
Hasta aquí mi comentario. Compártelo en tus redes y suscríbete.
Como siempre, recibe un abrazo.
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Excelente relato, efectivamente el calentamiento global está acabando con nuestro planeta, y solo nosotros podemos cambiar y cuidarlo, haciendo lo correcto.🤜🐺🤛
ResponderBorrarHagamos lo que nos corresponde. Por favor compartelo.
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