Los recuerdos duelen

Hola Amigos, cómo están.

No sé si a ustedes les ha pasado en algún momento de sus días: pero hoy, buscaba alguna melodía en piano; y me encontré una canción que hacía mucho tiempo no escuchaba. 

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Recuerdos de Mi Infancia (Richard Claiderman)

Tal vez a muchos les parezca extraña la canción o incluso no la conozcan,  pero he de decirles que al escucharla, me trajo muchos recuerdos y con añoranza, rememoré mi infancia y gran parte de mi pasado. 

Esos momentos que han quedado atrás. 

Vinieron a mí, muchos episodios de mi vida, aquellos momentos que parecía sufrir sin saber que era una de las mejores etapas que estaría viviendo.

Volví a esas calles de terracería que recorría montado en mi bicicleta.

A esos diferentes lugares donde vivimos en casas de alquiler.

Volví a esa calle por donde mi padre me conducía de la mano muy temprano las ocasiones en que me llevaba a su lugar de trabajo. O con mi madre cuando me llevaba al mercado.

Incluso volví a uno de los momentos más álgidos en mi vida. 

Es increíble, cómo una canción o una fotografía; te pueden llevar a un momento en el pasado. Un momento en que las añoranzas se vuelcan y tus recuerdos te invaden. 

Ves con nostalgia esos momentos hostiles, duros: en los que luchabas por sobre salir o sobre vivir. 

Esos momentos en que no teníamos la menor idea de cuán felices éramos a pesar de las circunstancias, a pesar de todo lo adverso. 

Han pasado muchos años ya, y conforme conocemos más de la vida, comenzamos a añorar y valorar nuestro pasado. Todo eso que construyó lo que ahora somos. No debemos pasar por alto eso que nos dio luz, o una línea a seguir. 

Por eso estamos aquí.

Siendo nosotros mismos, siguiendo el camino trazado por nuestros padres, pero hechos por nosotros mismos.

Así que las añoranzas nos pueden golpear llamándonos a recordar todos esos grandes momentos que marcaron nuestros destinos y nuestras vidas, lo importante es lo que ahora somos y hacemos, lo que hemos forjado gracias a las enseñanzas recibidas por cada uno de esos golpes de la vida.

Claro que los recuerdos también nos lastiman, tal como lo dijo el Sr. Bob Marley.

-¡Los buenos momentos de hoy, son los pensamientos tristes del mañana!-

Hoy solo nos toca dejar al menos algo que al final; se convierta en alguna remembranza que hable justamente de eso que fuimos y que hoy en día, nos coloca en la posición que nosotros decidimos. No es malo volver a esos recuerdos, por el contrario, debemos dar gracias a ello pues de lo contrario; si nuestra vida no nos hubiera golpeado tanto: hoy no seríamos nada.

Sí, es verdad que el pasado duele, eso es algo que no podemos evitar. 

(Fin)

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